Danzas de Elciego: Pasacalles, Danza, Cuatro Calles,  Árbol y Jota.

El 8 de septiembre es el día de la Virgen de la Plaza, Patrona de la Villa; es este día cuando se organiza una solemne procesión en la que se interpretan estas danzas. Se pueden ver también el primer fin de semana de julio, en el que se celebra la Fiesta de la Bandera con el acto de Reverencia o Tremolar a la Bandera; pero en honor a la verdad, hay que decir que no tienen la solemnidad de septiembre en la que ocho mujeres acompañadas del tradicional Katxi ejecutan las danzas.

Desde la Guerra Civil, los varones no acompañan, como hasta ese momento lo hacían, en la ejecución de las Danzas a las mujeres, por lo que bailes como Paloteaos o Troqueados, en la actualidad se han perdido. Habitualmente con la expresión “echar la danza”, los vecinos del Valle, mozos y mozas, bailan primero en corro para hacer luego el Castillo o Torre humana que espontáneamente construyen con el fin de que la persona que llega a lo más alto grita vivas en honor a las distintas poblaciones que forman el Valle.

Pasacalles.

Se utiliza para acompañar a la Virgen desde la Ermita a la iglesia y viceversa, usándose también para desfilar en kalejira por las calles o para entrar o salir de alguna danza en las actuaciones.

La coreografía es simple ya que se hace en dos filas que no varían y cada danzante marca el paso en su lugar al ritmo de la música avanzando o quieta en su sitio hasta finalizar.
Después de investigar y estudiar sobre el tema, se cree, que la melodía de esta danza pertenece al famoso gaitero de Laguardia D. Nicolás García.

Danza.

Salen las chicas a bailar en dos filas y forman una V saludando desde sus sitios, a la señal del tambor, se forman dos filas en línea recta y comienza el baile.

Cuatro Calles.

Tiene una estructura similar a la de los paloteao, repitiéndose cuatro veces con un sinfín de cruces y descruces.
Suena la gaita con una introducción que sirve de unión con el baile de “la danza “.
La melodía del baile se repite cuatro veces y al terminar cada una de ellas los danzantes se colocan en filan, después de haber rotado o girado a lo largo de toda la danza, los cuatro puntos cardinales, igual que ocurre con los paloteados.
Destacaríamos la secuencia conocida como las “sonámbulas”, en la que el danzante con los brazos estirados paralelos al suelo, mostrando las dos cintas de colores gira en torno a su compañera de frente y del lado.

Árbol.

A pesar de ser una Zinta Dantza, sus peculiaridades la hacen única.
El árbol es sostenido por una persona que se coloca entre las dos filas de danzantes; comienza la melodía que se repite continuamente a lo largo de las distintas posiciones, se van colgando las cintas en el árbol, primero la blanca arriba y luego la roja abajo, y se van quedando arrodilladas abrazando el árbol. Así lo hacen las dos primeras parejas, porque las siguientes, abrazan el árbol de pie, y la última pareja, tras colocar la cinta hacen un simulacro de abrazarlo pero en vez de eso, saltan en el sitio que les correspondería y vuelven a la situación de comienzo de la danza.
Todas las demás, poco a poco vuelven a sus sitios primitivos y cuando se vuelve a formar el círculo inicial, la melodía de la gaita cambia y acompañándose de las castañuelas, las dos primeras de las filas, salen hacia el exterior en forma de “fuente”, para volver a formar dos filas.

Jota.

Con el tiempo, esta jota ha llegado a tener un carácter popular, tradicional y autóctono, pero los estudiosos opinan que en un principio al ser el grupo sólo de hombres, la jota no se bailaría, y que se ha incorporado al repertorio de Elciego con posterioridad.
Habitualmente se interpreta esta danza en último lugar, después de todo el repertorio, dejando al público así con el regusto de oir una viva melodía acompañada por la destreza y vivacidad de unos pasos vistosos, en los que las mujeres bailan en corro y enfrentándose a derecha e izquierda exhibiendo una pericia inigualable.